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Bajo los Cerezos [Incesto Kiryu :3]

domingo, 1 de noviembre de 2009
Las flores de cerezo están cayendo- decía Ichiru mientras miraba por las ventanas de su residencia – OkaSan, OttoSan, ¿puedo salir? – el joven gemelo volteaba hacia donde su hermano.
El invierno acechaba en la región, pero la magia d esa familia permitía que las flores y planas florecieran. En el interior del hogar una llama consumía la madera produciendo un delicioso calor que hacia todo más cómodo. Los muebles de lino de tonalidades oscuras y sobrias resplandecían con la luz del fuego. El gran reloj de pared piqueteaba sobre la chimenea faltando poco para las once.
Zero miro por última vez la página que leía queriendo memorizar cada detalle como si fuera su última lectura, cerrando después el libro con sumo cuidado procurando no maltratar las hojas. Del otro lado, Ichiru lo contemplaba con respeto y admiración, ansioso, esperando la respuesta de su hermano.
-Vamos… Ichiru-le recordó Zero mientras se levantaba para dirigirse a la entrada y así poder salir. Ichiru sonrió y se camino hacia donde su hermano, que lo miraba calmadamente.

Ya, bajo los cerezos, aun con la suave y blanca nieve que caía la temperatura y el ambiente eran agradables, como la luz de los faroles que iluminaban el níveo paisaje. Las sonrisas y risas de ambos hermanos, así como las miradas eran un símbolo d su complicidad.
Ambos se veían entre sí, buscando un motivo para estar ahí, solos, uno más grande que la nieve y los cerezos. Aun en el silencio, con el viento que movía sus cabellos y la blancura que solo hacia resplandecer mas sus ojos violáceos. Sus miradas eran profundas, tanto que calaban el alma.
-Onii san- decía finalmente Ichiru, para olvidar el silencio, mientras se acercaba, jalando la manga de su hermano.
-Nanni?- preguntaba Zero, observando con ensoñación el rostro de su hermano. Aunque solo fueran dos minutos mayor, las diferencias eran enormes: Ichiru era 10 cm más bajo, sus orbes tenían un brillo interior dorado y las d Zero plateado, uno era más alegre y el oro callado y serio.Pasaron cinco minutos, los dos de la mano, contemplando las estrellas, el cielo, las flores, l rugir del viento y aquello que no se notaba: el amor entre hermanos. Finalmente, así como estaban, regresaron a su hogar, el silencio seguía presente, no faltaban palabras, eran hermanos y como tal lo sabían todo del otro.

COMENTARIO DEL AUTOR: Wii, ncontre mi OS perdido, espero que lo disfruten n__n

La Nada del cap 6 al 9*fic yuri*

miércoles, 2 de septiembre de 2009
*La nada* (Cáp. 6)







Después de lo sucedido con Karen ahora estoy mas unida a ella tanto como si fuera un familiar alguien al que conozco desde siempre, he aprendido mucho de ella de su fuerza y de su forma de mirar hacia delante, siempre se aprende algo nuevo de cada persona y ella es casi tan trasparente como el agua, ese día al salir de mi casa hice mi rutina diaria y fui a visitar a mi amigo Edgar todo parecía ir bien, entre como siempre lo que menos me esperaba era una encerrona por parte de mi amigo nada mas entrar a aquel maldito apartamento fue un interrogatorio por parte de Edgar no paraba de preguntar sobre mi ex pareja, yo intentaba evadir la respuesta termine por decirle que no la había vuelto ver, Edgar parecía aliviado no se el motivo.


-esta a punto de llegar.


-¿quien?


- mi futura esposa. (Sonriente)


-¿la quieres?


- por supuesto, ella es lo que me ayuda a seguir adelante y enfrentar todo mis temores.






(Edgar proviene de una familia poderosa y ella también)






-te deseos toda la felicidad de este mundo Edgar (melancólica)


-gracias, se que lo dices de verdad, ¿iras a la boda?


-si por supuesto (ya no tengo nada de lo que temer no haré nada que lo perjudique porque ante nada el es mi amigo), ¿para cuando será la boda?






-dentro de una semana (feliz).






Salí de allí en cuanto pude para no encontrarme con ella, se que no servirá de nada, pero aun así no quiero volver a verla. ¿Que sentiré? cuando la vea vestida de blanco a punto de casarse con Edgar, no quiero ni imaginarme lo que sentiré porque ya de pensarlo me duele el pecho aun no lo he superado del todo, el tiempo lo cura todo, se que no moriré de amor.






Al cruzar la carretera de vuelta a mi casa vi a una persona cruzando y un coche que venia en dirección prohibida no podía creer lo que estaba a punto de ocurrir tenia que hacer algo pero que lo único que podía hacer era avisarla grite, y grite cuidado…


Esa persona que cruzaba la calle era Karen se había percatado de mi aviso y esquivo como pudo el coche.






Corrí hacia ella la ayude a levantarse.






-¿esta bien? ¿Te duele algo?


-no tranquila, gracia a ti no paso nada mas, aunque no creo que me matara no iba muy rápido, lo único que quería ese coche era asustarme.


-¿como? ¿Te ha pasado otras veces?


-si mi madre ya me ha hecho este tipo de aviso para que no manche el apellido de la familia.


- esta loca.


- para ella primero es el apellido, después el dinero y por ultimo sus hijos.


- ¿tienes hermanos?


- si uno el Carlos, arruino las empresa que mi padre, una de las mas importantes, se llevo todo el dinero y desapareció del país, mi madre se encargo de eliminar toda las pruebas de aquella mancha en el apellido soborno y amenazo de muerte a todos los que tuvieron algo que ver con la empresa.






- pero a ti ¿por que quiere callarte?






-pues porque soy lesbiana, si sus amigos de las altas esferas se llegan enterar de esto ella quedaría en ridículo, según ella no permitirá que una enferma arruine su buen nombre que tanto a luchado por tenerlo, incluso me quiere concertar un matrimonio arreglado.






-¿que harás?






- ya no me importa nada, ella me quito lo que mas quise en esta vida, no la perdonare (enfadada)






Esta ves no la vi llorar solo vi una mirada de rencor y desesperación que nunca vi en ella, incluso el agua mas clara se puede poner turbia, hasta el ave mas libre puede ser capturado y encerrado en una jaula de cristal, ese cristal es tan fino que de un golpe que le des se rompe haciéndote heridas que dejan una cicatriz imborrable.






Me impresiono esa lucha contra la corriente, ese carácter de Karen me envuelve y me hace pensar lo pequeña que soy ante ella, ojala yo tuviese ese coraje de lucha, de decir la verdad de una ves por todas, de decir de una ves lo que soy y lo que siento, pero no tengo ese valor que ella pose.






Ahora es ella quien tiene ese vació en sus ojos ``la nada´´, no puedo ni imaginar como a sufrido y como ha tenido que luchar todo este tiempo sola sin nadie mas al que contarle sus penas y sus sueños, sus alegrías.






CONTINUARA…






La nada (cap7)






Ya ha pasado unos días, estoy confundiendo mis sentimientos hacia Karen, noto que confundo la admiración con amor, será que se puede dejar de amar a alguien y no darte cuenta de que has dejado de amar, ahora siento como si me hubiese quitado un peso de encima, pero otro diferente se me hubiese añadido, Karen leva unos días con pesadillas, yo la conforto como puedo creo que me he abierto mas a ella que ninguna persona en mi vida, será que ella hace que pueda llegar a confiar en alguien ciegamente puedo yo cambiar mi desconfianza hacia la gente gracias a ella, podría ser que me he enamorado de su fortaleza y su debilidad siento unas ganas tan grandes de apoyarla de que confié en mi, otra noche mas Karen con otra pesadilla.(me siento en la esquina de la cama)


(Habla en sueños)


-no, ella no. (De quien estará hablando)


Habré los ojos y me abrasa diciéndome






-no me dejes por favor. (Rogándome)






-no me iré Karen confía en mi.






-¿Puedo dormir en tu cama hoy? (tiene miedo)






-Vamos claro.






-Gracias por no rechazarme por ser…






-no digas eso nunca lo haría.






-como estas tan segura (me mira a los ojos con tanto miedo)






-por eso no te preocupes Karen a los amigos no se les rechaza así como así (aun no le he contado nada y no se porque)






Nos acostamos en mi cama las dos, ella no me soltaba la mano, no quería que me fuera, esa noche durmió como llevaba tiempo sin hacer.






Al día siguiente la invite a la boda de Edgar entre otras cosas no quería ir sola. (Se lo dije con un poco de tiempo, unas horas para arreglarnos)






-no es mejor que invites a otra persona (extrañada)






-no tengo pareja y no quiero ir sola.






-no seria mejor que invitaras a un hombre.






-si como tengo tantos en mi vida (debería soltárselo ya)






-bueno vale, ¿hay que ir de gala?






-¿y eso que es?






-de etiqueta, trajes (explica)






-ah pues yo iba a ir con esto de mi madre, me da un toque serio.






- ¿de negro?






-pues si que hay de malo.






- y esa pamela (la mato) si pareces la viuda negra toda de negro.






-exagerada, si me queda muy novelesco parezco una rica que esta de luto por su marido fallecido (que felicidad)






-(como se puede alegrar por eso, valla imaginación) Ven conmigo anda.






Me llevo a su cuarto y me deja uno de sus vestidos.






-Este te quedara bien, es un vestido diseño con escote Diana y con caída irregular en gasa está combinado con el escote drapeado y con un tirante brocado (color azul cielo pero no muy intenso) es sencillo pero creo que será muy agradable vértelo puesto.






-(todo lo que a dicho) si ya me lo pruebo (haber quien le dice que no ahora)






Ella ya estaba vestida (con un traje rosa claro y un precioso peinado ondulado)






-estas bellísima ya veras como se quedan asombrados.






-si claro, (ni caso) (ya no quiero ir aun que lo haré por Edgar)






Un coche enviado por Edgar vino a recogernos ya estábamos en la boda, la boda era al aire libre era un jardín precioso rodeado de arbustos flores, no muy formal, nos bajamos del coche.






Ya estamos aquí por fin el día de la verdad ha llegado.


La novia no llegaba o eso creíamos todos, estaba tras los arbusto aprovecho que Karen se había despistado y me había perdido de vista para empujarme hacia ella, que estaba escondida.






-no tengo dinero. (No sabia quien era)






Me doy la vuelta y era ella.






-pídeme que no lo haga y te juro que saldremos de aquí lo mas rápido posible.






-(estoy confundida) como pretendes que te pida eso, ese hombre que te esta esperando, hay es mi amigo.






-¿el es mas importante para ti que yo?.






-no seas egoísta no me hagas esto, tu para mi eres mi ex pareja la que me hizo mucho daño y el es un buen amigo que no me ha hecho daño (indirecta).






-¿solo soy eso para ti? ¿Ya no me amas?






-no, ya no se ni lo que siento, pero amor ya no es.






Comienza a llorar:






-¿Quieres a Edgar aun que sea un poco? (le pregunto)






-si pero a ti te amo (llorando) por favor no dejes que lo haga a quien amo es a ti. (Suplica)






Se aproximaba a besarme, mientras me decía.






-demuéstrame que ya no me amas.






Karen estaba escuchando y viendo todo tras de mi, al ver lo que me iba a besar, salio corriendo.


Yo me di cuenta, al ver que algo se movía vire la cara dejando a la persona que tanto daño me izo atrás ya que de inmediato Salí haber quien era y era Karen.






-Karen (grite)






Hecho a correr por todo el jardín que parecía interminable yo me apresure detrás de ella no sabia ni porque estaba tan desesperada por alcanzarla.


(Mientras pensaba varias cosas a la vez)






-(¿como puede correr tan rápido con esos tacones? a mi ya me duelen los pies) Karen espera ¿por que corres? Para (grite)






Ella seguía corriendo parecía que nunca pararía.






-(que va con estos tacones no puedo correr)


Me pare y me quite los tacones tirándolos y seguí corriendo detrás de ella ya casi la había alcanzado.






Pero cuanto mas corría, no dejaba de pensar ¿por que tanto empeño en explicarle las cosas?, ¿por que tanta desesperación? Sentía como si ni la fuera a ver nunca más y tenia que correr hacia ella como si mi vida dependiera de eso.






CONTINUARE…






(Confesión quise poner el vestido, si me entro ganas de añadir algo extra para q se imaginaran como quise vestir a la narradora)










La nada (cap8)






Ya la había alcanzado no sabia como pararla así que me lance sobre ella abrasándola (por detrás) para que no se moviera.






-lo siento Karen, no sabia que ella haría algo así.






-suéltame. (En un tono muy suave)






-pero Karen.






-que me sueltes te digo (muy despacio)






-esta bien (asustada)






-me voy de aquí (sus ojos no expresaban nada) puedes irte a impedir la boda si así lo deseas.






-¿Como me puedes decir esto? Yo siempre intento apoyarte por que tu no a mi.






-¿ella es la persona que te hizo tanto daño?






-si lo es (bajo la mirada)






-¿por que nunca me dijiste que eras lesbiana? porque no confiabas en mi ¿verdad?






Ya no tenia defensa no sabia porque nunca se lo dije.






-no sabes ni como defenderte, me voy de aquí (muy firme en su decisión)


-muy bien adelante vete.






Ya no tenía excusas no sabias ni que decir para que se quedara, y no sabia que hacer para que no se fuera de mi vida sentía como si ese, me voy fuera de verdad que se iba.






-(¿por que no me lo impide eso es lo que le importo?)¿Qué sientes por mi?(tenia que preguntarlo)






-no lo se.






-¿como? (decepcionada)






-no lo se Karen, solo se que te necesito, pero no se si es solo como amiga (empiezo a llorar)






Porque lloro que débil soy a la primera de cambio me derrumbo.






-¿te puedo besar?






-¿como?






Se me acerca rosa sus labios con los míos, yo intento evitarla pero ella no me deja, el pecho me duele ¿por qué reacciono a su beso? ¿Porque le correspondo? Nos comenzamos a besar sus labios, su lengua, el rose de sus pestañas, me gusta el sabor de sus labios, me empiezo a sentir cómoda besándola.






Ella se aparta preguntándome lo que sentí






Yo me quede muda, no sabia que hacer ni que decir era una de las pocas veces en que la vi como lo que es una mujer.






-¿Te gusto? (sus ojos al fin demostraban algo y era miedo a lo que diría)






-si me gusto, pero eso no significa nada.






-¿Probamos de nuevo?






-si (pero que digo me he vuelto loca ni siquiera dude la respuesta)






Mi boca hablaba por mi no podía decirle no pero ¿que estaba pasándome?






CONTINUARA…


La nada (cap9)






Ella acercaba sus labios a los míos yo me aparte, no se porque ni yo misma me entiendo.






-perdóname no debí aceptar esto (me disculpo)


-¿por que no?


-yo no debo verte de ese modo (no quiero verla así, no puedo no debo).


-si tu no puedes verme entonces no lo hagas.


-¿como?


-cierra los ojos y no los abras, si no funciona me rendiré, te lo prometo, no volveré aponerte en esta situación.






Cerré mis ojos sentía como se acercaba su mejilla estaba húmedas mientras me besaba, me decía:






-aun no los abras.






Me seguía besando, mi corazón no paraba de latir parecía que se me fuera a salir, no quiero admitirlo pero se que la amo pero no puedo ni decir esa palabra maldita que me ha atormentado todo este tiempo, no quiero perderla como amiga mas vale tenerla así a no tenerla de ningún modo, presiento que si seguimos así terminaremos mal.






-aun no sientes nada (preocupada)


-no lo se (mentira, se valiente dile que la amas díselo ya)


-esta bien vamos a casa.


-vale.






Empezamos a caminar, nos subimos a un taxi, ella sentada lo más alejada posible de mi, no apartaba la mirada de la ventana, no me miraba en absoluto, al llegar por fin a la casa, me dispuse a pagar el taxi, mas bien ambas fuimos a pagar, nuestras manos se juntaron, la aparte de inmediato casi como un acto reflejo, así que pago ella, su cara al ver que aparte mi mano era de un inmenso vació, ella tenia las llaves de la puerta y esta que no se abría, parecía una mala jugada del destino, sus manos temblaban al paso que íbamos no abriría la puerta en la vida, así que ahora yo puse mis manos sobre las de ella, cogiendo de ese modo las llaves y poder abrir de una vez la vendita puerta, entre los nervios de que ella estaba detrás mía con su respiración en mi oído, y la puerta que no ponía de su parte, al fin se abre la puerta, entramos yo me fui a la cocina a beberme agua, de tantos nervios que tenia el vaso iba de un lado a otro y el agua casi aprende a volar, había perdido el control de esta forma ¿por unos besos?, esto no era normal Karen apareció detrás mía.






-deja de marear el vaso al final lo vas a tirar.(lo dice con mucha frialdad)






Se me cae de las manos, ella lo coge antes de que caiga,


Y me vuelve a ponerle vaso en mi mano.






-por lo menos te provoco nervios mas vale eso que nada (sonríe falsamente)






-me voy a mi cuarto (huyendo)






-¿por que huyes?, acaso tienes miedo de algo o de alguien (intentando hacerme estallar)






-no es solo que estoy un poco cansada (intentando huir como sea).






-tu no sueles huir así, ¿no será por mi?






-no es eso solo estoy agotada.






-si tanto te incomodo me voy de esta casa (muy directa)






-no seas niña caprichosa.






-yo no soy caprichosa.






-como que no, por favor déjame dormir contigo, no te valla (imitándola)






-si tanto te molesta me lo podrías haber dicho antes.






-no me molesta, mas bien me da ternura.






-claro porque solo me ves como a una niña pequeña.






-se te olvida caprichosa (me estoy pasando)






-yo no quiero que me veas así (sube la voz)






-el hecho de que subas el tono no quiere decir que te haga mas caso (porque no paro de herirla)






-¿que pretendes tratándome así?






-(me conoce muy bien) ¿que piensas tu que pretendo? (que clase de juego enfermizo es este)






-creo que quieres que te deje huir de todo esto.






-(acepto) me canse de este juego, me voy.






Me di la vuelta dándole la espalda y empecé a caminar.






-no me des las espalda, no huyas.






-quien te crees que eres para darme ordenes (otra ves mas la hería)






-la persona que mas te ama ¿te parece suficiente?






-eres una caprichosa y tu capricho del día soy yo, y no estoy dispuesta a este juego del gato y el ratón (¿que digo? no paro)






-si fueras un capricho no sufriría tanto para que te fijes en mi como mujer.






-no digas esas cosas.(es imposible no fijarse en ella)






-te lo estoy rogando, me estoy humillando, crees que si fueras un capricho te pediría que te fijaras en mi.






-Karen para ya.(sube la voz)






-piensas que porque subas el tono de voz te haré mas caso (se la devuelve)






Se me esta acercando que hago no se si podré aguantar mas.






-no te acerques tanto.






-¿te doy asco? (se sigue acercando)






-no, nunca me darías asco.






-entonces déjame intentar que me quieras aunque sea un poco.






Esta cada vez más cerca.






-yo ya te quiro karen (la amo que es muy diferente)






-pero no del modo en que yo quiero.


Me hago para atrás, ella me sigue me quedo contra la pared y ella delante mía.










CONTINUARA






Confesión lo de estar contra La pared es una mas de mis fantasías

La Nada del cap 1 al 5*fic yuri*

*La nada*





Primero quise llorar, después solo quise desaparecer del mundo en un lugar donde el dolor no existiera, en donde la vida solo fuera una palabra, porque en mi interior ya estaba muerta, el amor solo llego a mí una vez en la vida, sus manos rozaron mi piel, sus ojos me miraban a mi solo a mi, pero su corazón no era para mi, yo lo sabia pero no lo admitía, sabia que se marcharía y ni siquiera adiós me diría, solo fui un abrigo que usas cuando tienes frió, un día desperté y ya no estaba allí solo había un hueco vació un amor no correspondido, solo dejo su olor lo demás se lo llevo hasta mi corazón lo único que tengo son recuerdos de alguien que nunca me amo no, odió no amo, no siento ya ni dolor, sólo recuerdo lo besos no sentidos, los abrazos no correspondidos ,las caricias mas suaves que ahora se me clavan como puñaladas , me quedo el miedo y la desconfianza, pero no puedo odiar su recuerdo, no puedo olvidar sus palabras aunque fueran mentira eran mi verdad era la energía que me mantenía con vida, ahora vivo por vivir y sueño por soñar, hablo por hablar, aun quiero que vuelva con una sonrisa y que me diga que solo tuve una pesadilla ,que aun esta a mi lado que me quiere pero eso es solo una Fantasía.








Espero que os guste






*La nada* (capitulo 2)


Me miraban como a una loca, miradas de compasión también había, ellos no sabían el porque había perdido la ilusión por la vida, nadie me entendía y ni falta que me hacia, yo quería cambiar pero todo me lo impedía, quería volver a Verla y decirle lo que sentía, Quería poder decirle a la cara, todo lo que he llorado, por su mentira de que me quería, pero sabia que no me la encontraría, la vida te da la espalda pero yo no le daré la espalda a la vida, seguiré adelante no mirare atrás, se que podré hacerlo, se que lo haré.






A medida que pasaba el tiempo seguía con mi idea de cambiar y de no caerme otra vez, pero cuando todo parece estar bien el pasado vuelve a tus ojos de la manera menos inusual, que se podría esperar, ella apareció de la mano de mi amigo, el corazón se me paro y se volvió a romper en dos una y otra ves.






Ella me saludo como si nada hubiese pasado, como si fuéramos amigas de toda la vida y la distancia nos hubiera separado, me quede muda no sabia ni como decir hola o como huir de la situación ¿Qué hago ahora?






CONTINUARA…


*La nada* (capitulo 3)


Que hipócrita, no puedo creer la situación en la que me encuentro, estoy entre la espada y la pared, le doy una bofetada o le corto el rostro, si hago eso mi amigo se quedara sorprendido y me odiara por tratarla haci, ¿que hago la saludo como si nada?


Así lo hice la salude como si nada y con una sonrisa (no se ni de donde saque fuerzas)


Mi amigo Edgar no sabía que no conocíamos y pregunto de donde, no podía decirle que fue la persona por la cual me había encerrado en mi misma durante tanto tiempo, le pregunte que si eran novios ya os imaginareis ¿su respuesta? Efectivamente fue un si rotundo además me comento que querían casarse, lo mas pronto posible, ella estaba parada al verme tan fría con ella, creo que ella prefería que la insultara a que la ignorara, su estupido orgullo y ego no podía comprender que la hubiera olvidado (aunque no la hubiera olvidado aun, ella no lo sabia al fin y al cabo ya había pasado bastante tiempo casi un año).






- ¿Cómo estas? (le pregunte)


- Bien como tu ¿no?


- Si veo que el tiempo te ha sentado, muy bien estas muy guapa será porque estas con Edgar, el es un sol.(mentirosa como pudiste irte sin decirme adiós o decirme que no me quisiste nunca)


- Si (riéndose falsamente)


- No hace falta que me rías las gracias, cuando no lo sientes (le susurre al odio).


- ¿Como?


(Seguíamos hablando muy bajo para que Edgar no se percatase de lo incomodo de la situación)


-te conozco demasiado como para saber cuando te ríes de corazón y cuando no. (Por fin tengo yo la sartén por el mango, quizás esta sea mi ultima oportunidad de vengarme, aun que sea un poco de su abandono)


-quería llamarte.(me dijo con una vos de inocente)


- tranquila, yo no deseaba que lo hicieras (manipuladora yo soy una entupida pero no me dejare engañar por tu falsa culpabilidad).






En ese momento hubo un gran silencio y su expresión de seguridad ya no estaba.


-Bueno adiós –me despedí-


Me dirigí hacia Edgar el cual estaba un poco apartado para dejarnos hablarle di un beso en la mejilla.


Ella se quedo parada pero no callada diciéndome






- ¿y de mi no te despedís con un beso?






-Si claro (Pero ¿como se puede ser así? Esta pregunta no se me quitaba de la cabeza)






Me puse en posición de darle un beso de despedida, pero en ves de su mejilla me puso sus labios sin darme cuenta termine besándola fue solo un pequeño beso un pequeño acercamiento..


No me podía creer que hubiese hecho eso delante de Edgar y para terminar de sentirme peor seguía locamente enamorada de ella.






CONTINUARA…






*La nada* (capitulo 4)


¿Como he llegado a este punto?, ¿que podía hacer?, lo único que pude hacer fue apartarme lo mas rápido posible, huí lo mas rápido que pude, no mire atrás, de camino a casa mientras seguía corriendo, las lagrimas iban cayendo una a una, cada lagrima era un poco de mi nuevo yo, que estaba construyendo, ya me había destrozado de nuevo, una y otra ves.






Ya me había secado las lagrimas, al fin llegue a mi casa, allí me esperaba mi madre con una chica a su lado.


-Cariño ¿te pasa algo?


-no, no, bueno entro casa, adiós (no tengo ganas de hablar con nadie).


-pero cariño atiende a nuestra nueva invitada, alquilara el cuarto de tu hermano (el ya se había casado y se fue a vivir con su esposa).


-¿que? ¿Vas a meter a una desconocida a nuestra casa? (increíble)


-no es una desconocida, se llama Karen, y es la hija de una amiga mía de la universidad.


- ¿y porque no esta en su casa?


-bueno mi madre me hecho de casa.


-(para rematar) ¿y lo dices así?


-si, es la verdad (¿a ella no le importa?)


-bueno, te enseño la casa Karen (mi madre).


-pero ¿esto es una cámara oculta o algo? Como vas a meter a alguien a que han echado de casa, a saber en que se habrá metido.


-Hay cariño no seas así, la casa es bastante grande y además, tu hermano se marcho ya, y el cuarto de el esta desocupado.


-si, pero sigue viniendo (haber si así cambia de opinión)


-claro, porque la mujer no sabe cocinar (me esta dejando sin argumentos)


- ¿y si se quiere queda a dormir?


-pues que lo haga, que se quede en el sillón, el ya tiene su casa.


-esta bien has lo que quieras (me ha dejado sin excusas).






Me fui a mi habitación y cerré la puerta, no tengo ganas de oponerme a mi madre, total será tiempo perdido, aunque no dejaba de pensar el porque echaron a esa chica de su casa.






Al final había logrado dejar de pensar en mi maldito amor, por ella.


Pero una visita inesperada llamo a mi puerta aquel día, que ya se había convertido en noche.






Mi madre me llamo, diciéndome que me llamaban,baje pensando que seria alguna amiga o Edgar, maldita la hora en que baje a ver quien era.(si era ella)






-hola ¿como estas? Quiero hablar contigo de algo importante ¿Puedo subir a tu cuarto?






-no ¿Qué pretendes? (no la entiendo)


-solo quiero hablar de Edgar (no se porque, pero no la creo)


-esta bien (no me queda otra que dejarla subir)






Mientras Subimos a mi cuarto, cada escalón era un recuerdo de nuestra relación, en esas escalera nos dábamos la mano para subir a mi cuarto, en la puerta me acariciaba la cara, y al cerrar la puerta me besaba, extraño esos besos, me duele recordarlos se que eran fingidos, que nunca me quiso pero aun así, los necesito, que tonta me siento.


(Ya hemos entrado en mi cuarto), (ella se sienta en una esquina de la cama)






-Bien ¿de que querías hablar? (no dejare que me manipule)


-solo quería verte de nuevo, que recuerdo este cuarto. (No me lo creo)


-lárgate de aquí por favor, ya esta bien de juegos, soy una mujer no tu juguete.


-yo no te veo como un juguete, te veo como una mujer en todos los sentidos y por eso… (Ha parado de hablar)






Me agarra del brazo y me empuja a la cama, ella se sitúa encima de mí, mi corazón no para de latir cada ves mas fuerte, ¿que debo hacer?, no lo que siento si no lo que debo.






-apártate, no me toques (gritando)






Sus ojos se quedaron sin vida, se aparto de mi muy lentamente, como queriendo que le dijera que me perdonara o que le pidiera que siguiera, pero no hice nada, deje que se fuera, antes de irse me dijo.






-lo siento, me voy, adiós.










Ahora no se que hacer, solo se que ya no soy tan débil como al principio lo único que puedo hacer es seguir adelante, sin importar lo que suceda, aun me duele el pecho de pensar en ella, pero esta ves, yo puse un alto, por esta ves yo me defendí de ella, no volveré a dejar que me hieran.


Porque soy una mujer que siente, desea y ama no soy ningún títere, no volveré a hundirme, y mucho menos por ella.




CONTINUARA…




*La nada* (capitulo 5)




Después de su ida solo me quedaba un vació, volví a sentir la nada de nuevo pero esta ves yo tenia algo que no poseía antes, tenia fuerza de voluntad y ganas de vivir.


Karen ya se había instalado, después de un mes, ella seguía muy sincera pero aun no me a dicho el porque la echaron de su casa, pero hoy la llamaron por teléfono, creo que era su madre, le dije que la habían llamado y que era su madre en ese momento vi en su rostro una tristeza que no había visto en todo este mes, me extraño ver esa mirada vacía en su mirada, el teléfono volvió a sonar, era la madre de Karen de nuevo, lo único que me dijo es que iba a venir a hablar con su hija, que mujer tan fría pensé.


Quizás es lo que me pareció a mí por ese teléfono, pero puede que solo fuera una impresión mía.


Ese día creo que por fin conocí a Karen.


Su madre llego, al entrar por la puerta parecía que una brisa fría se acercase a mi garganta y no pudiese hablar, si yo sentí eso no paraba de preguntarme lo que sentiría Karen, ella bajo de la habitación, se había puesto un vestido rojo, precioso.


(Me quede embobada)






Pero lo que mucho menos me esperaba ese día fue la conversación que mantuvieron ese día en el salón de mi casa Karen y su madre.






-¿vas a volver a casa? (como si fuera una orden, mas que una petición)






-no volveré a pisar esa maldita casa, en donde solo recibo criticas, y no me aceptan como soy (Como odio toda mi vida)






-no me hagas hacer venir a tu padre.






-Adelante llámalo, le explicare mi situación, lo diré rápidamente, para que el dolor de que su mayor orgullo sea…






(Su madre le pega una cachetada haciendo así que calle)






-no ventiles nuestros problema, en donde no viene a cuento.






-¿nuestros problemas? ¿Desde cuando? ¿No me dijiste que estaba enferma?, ahora te haces la buena madre, cuando sabes muy bien que me has agobiado todo lo que has podido y más, para que según tú ``mi supuesta enfermedad ´´ no la supieran tus adorados vecinos y conocidos de la alta sociedad, hasta me has prohibido, salir de casa para que no cometa ningún error.


(Poniendo su mano en su cara en donde a recibido el golpe)






-reconoce que estas enferma, tu eres el mayor orgullo de tu padre, no hagas que te quite tus derechos por una de tus locuras.






-déjame en paz, y con mi enfermedad (con un tono de ironía), lárgate (salio corriendo subiendo a la que ahora es su habitación)






Su madre se marcho, ni se despidió, antes de irse le viro la cara a mi madre, yo subí haber como estaba Karen, estaba en un rincón de la habitación sentada, mirando a la pared, le pregunte si estaba bien, pero ella lo único que me dijo fue:






-vete, no quiero que me veas llorar, no permitiré que me humillen mas, de lo que ya lo han hecho.






Como un acto reflejo la abrase por detrás, no se el porque pero creo que ella me recordó a mí, fue como compartir nuestra soledad y convertirla en una sola, ella me pregunto:






-¿por que lo haces? (secándose las lagrimas)






Yo solo respondí:






-lo que me hubiese gustado, a mi recibir en tu lugar.






Ella no pregunto nada mas simplemente nos quedamos sentadas hablando de nuestros problemas fue como liberarme completamente y compartir un poco de mi, ella también parecía aliviada, ahora estamos hablando de nuestro problemas, (aunque no llegamos a hablar de todo lo sucedido con su madre, aunque yo me hacia una idea de lo que, quería ocultar su madre), ella ahora es una razón mas para no quedarme en la nada, en la que un día yo quise vivir, para que no me hicieran mas daño, ella es un ejemplo de lo que es capas de aguantar una persona.






Ella es como una luz, que han intentado apagar, pero su vida la hace brillar, es un pájaro al que han intentado encerrar, pero ella siempre lucha por escapar.






CONTINUARA

Destino y Promesa

domingo, 23 de agosto de 2009


¿Recuerdas ese día, en que te jure amor? El cielo brillaba de un azul intenso, no hacia viento pero si una ligera brisa y el sol resplandecía como si fuese su último día. Tu falda se movía con el viento dejando ver más de aquella piel que me fascinaba y tus cabellos se arremolinaban contra tu rostro, desprendiendo un aroma dulce a durazno. Sin duda eras hermosa, y ese uniforme de colegiala te hacia lucir más, con ese moño color vino que decoraba tu camisa blanca al igual que tus medias hasta medio tobillo y esa falda de cuadritos color negro, como siempre, los accesorios no hicieron falta en ti, llevabas una linda boina negra a juego con tu falda y un pin prendido a esta. Te veías tan tierna e inocente, infantil, pero con esa delicadeza, feminidad y elocuencia que te vuelve mujer.
Finalmente dije las palabras en esa que era la azotea de la escuela, y mientras esperaba la respuesta pero nunca llego y fue primero el timbre del colegio antes que tu voz. No la oí, y derrumbada decidí salir, había perdido, creí que tenía una posibilidad y había sido todo falso, irreal. Creí en mis amigos, en esas que concebí como tus señales pero nada era cierto, y fue difícil descubrirlo, notarlo en tu silencio. Mientras lo pensaba, recordando cada rato cada instante que pase contigo y anhele esos que eran tus labios.

Mi mente distraída, mis ojos ciegos y los susurros que eran ahora mi voz. Todo sucedió, no se podía evitar, y así mientras huía de tu verdad fui dando pasos inconscientes hacia lo que seria el fin de mi vida humana más no de mi amor hacia ti. Caí en uno de los tantos escalones que formaban el bachiller, rodé sufriendo varios golpes en el descenso, al final...

Ahora estoy aquí… viéndote una vez más como cada año. Te veo llorar, implorar mi nombre y susurrar tantas cosas que jamás creí, vas usando el negro de luto y te paras frente a mi, me miras a los ojos pero no te das cuenta, para ti solo soy la brisa que mueve tus cabellos, pero estoy presente, acaricio tu mejilla y delineo aquellos labios que tanto deseo besar. ¿Por qué no me puedes ver? ¿Porque debe ser ahora? Se que si me hubieras dicho, si hubieras admitido tu amor en su momento no estaría aquí, viéndote llorar…

Si he muerto, pero ¿sabes que me hace feliz? La idea… el saber que así puedo verte por siempre… y sentir tu cuerpo… tan cerca al mío… aunque solo sea un fantasma…

Delicioso Pecado

sábado, 22 de agosto de 2009

TITULO: Delicioso Pecado
ADMIN: Edward / Pietrus

TRAMA: En este internado religioso estudian los jóvenes cuyos padres confían más en la educación que les pueda dar un cura que la de cualquier maestro no religioso.
Debido a que es un centro para varones, el personal docente está compuesto por curas. No hay ninguna mujer en las instalaciones más que las madres que una vez al mes vienen a visitar a sus hijos.
Pero tras las clases magistrales del personal que se muestran a los padres y el ambiente estricto y reglado que caracteriza a los curas, se esconde otro mundo… un mundo en el que el personal aprovecha cualquier ocasión para formar a los jóvenes en el arte del sexo y el placer, adiestrándolos para ser los juguetes y mascotas sexuales perfectos.
Obviamente no todos se muestran dispuestos a satisfacer los pecaminosos deseos de sus maestros, pero ante la amenaza de suspender y no poder ir a la universidad pocos se niegan a arrodillarse ante sus tutores y trabajarles la entrepierna o a abrir las piernas sumisamente y dejar que les monten…
Pero incluso en estas situaciones acaba surgiendo el cariño y la ternura. Algunos profesores no pueden evitar encariñarse con algún alumno en especial, y estos a veces se enamoran tontamente de sus maestros...


LINK: http://deliciosopecado.foroactivo.com/forum.htm